sábado, 28 de mayo de 2016

Las adicciones

James Douglas Morrison, conocido mundialmente como Jim Morrison no solo era un excelente vocalista de la gran banda ''The Doors'', decían que Jim era un hombre de pocas palabras al principio, que incluso tenía que digerir ciertas sustancias para soltarse en el escenario y que además era un amante incondicional de los libros, era capaz de gastarse todo el dinero en libros más que en ropa, probablemente esto hizo que la banda tuviera unas canciones con unas letras buenísimas.
Así como Jim tenía cierta adicción con los libros (y sustancias), Elvis lo tenía con las hamburguesas, Michael Jackson al demerol y las operaciones, Madonna al ejercicio y al baile. En fin, todos somos adictos a algo.
La adicción simplemente llega como si fuese algo que se cree pasajero, pero es algo a lo que necesitamos acceder, poseer cada día y no te das cuenta cuando pasan meses o años y sigues con tu adicción, algunas se pueden superar, otras no.
Un ejemplo el cual es el más conocido y que afecta a la mayoría de las personas es la adicción al café, desde ya la cafeína es adictiva, pero en la mañana para despertar es bueno un café, para el frío es bueno un café, para leer, trabajar, estudiar, cenar, antes de acostarte porque tienes cosas que hacer y no puedes con el sueño pegado, entonces, cómo no te vas a hacer adicto a algo que realmente necesitas?


Con las personas adictas al alcohol, al sexo es casi lo mismo que con el café, con la diferencia que si no tienes alcohol haces hasta lo imposible por agarrar el auto o incluso ir corriendo a la botillería, coger una botella (un gato por ejemplo), pagar y en el momento en que vas a tu casa y llegas, te la bebes como si fuese el agua y tu un sediento de aquellos. Con el sexo sería demasiado extraño que una persona desesperada vaya corriendo a la casa de otra y llegue con los pantalones abajo diciendo que ya no aguanta más...claro que sería muy cómico que esta se presente en medio de una cena familiar.
Mucho se dice que nosotras las mujeres tenemos hasta una debilidad con los zapatos, la verdad es que si fuese posible tendríamos la casa llena y ocuparíamos unos Manolo Blahnik hasta para ir a comprar una caja de fósforos a la esquina, uno se pregunta cómo es que existe tal debilidad, fácil, la moda influye demasiado en las mujeres y hasta a la que le importa un comino la moda se viste a su propia manera y está siendo una influencia, para así terminar como moda.
La mayoría de las personas que me rodean tienes ciertas adicciones que cualquier otra persona puede tener, ya sea con la música, libros, con personas (y ojala que no sea una mala adicción), a la comida (que es algo general, si no es así entonces no tienes el derecho de llamarte ser humano). Pero también hay personas con ciertas adicciones bizarras, esas adicciones que nos parecen dignas incluso de llamar freaks y que ojala uno no sea parte de aquellas adicciones.
Ahora, bien una adicción puede salvarte o puede matarte, muchos son los ejemplos de cómo te salvan, pero también de cómo matan y claro es el ejemplo de nuestro querido Jim con la heroína.

miércoles, 25 de mayo de 2016

Los amigos hombres y lo bien que hacen.

Cuando pequeña rondaba el rumor ''No te juntes con los hombres porque son bruscos'' o ''Si te juntas con hombres te va a salir pene'', frases bastante ridículas que hacen que uno se ría, hoy en día por ejemplo (y personalmente) a veces me junto con hombres y no tengo que andar cubriéndome la falda en caso de alguna sorpresa y no me refiero a aquella sorpresa inesperada de nosotras las mujeres.
Estoy segurísima que todas tenemos un amigo hombre, uno en el cual confiamos y nos reímos al igual que cuando estamos con nuestras amigas, incluso más, depende del tipo de amigas que tengas.


Ahora, esta mucho hoy en día la frase ''un hombre y una mujer pueden ser amigos'', efectivamente, pueden serlo y no necesariamente el muchacho debe ser gay para que la amistad sea fuertísima por años, sea como sea, él es y será tu amigo a pesar de todo. 
Cuando eramos niños no nos fijábamos tanto en el tema de que si te juntabas con un hombre te iba a gustar y todo iba a salir mal o todo lo contrario, solo te preocupabas de jugar y pasarlo bien. Ahora si tienes un amigo se confunden mucho las cosas, pero bueno, nunca se sabe lo que puede pasar de aquí a uno o varios años, eso es cosa de unos y también del tiempo, es inesperado, pero hay amistades que perduran por siempre sin importar el sexo.
En el caso de nosotras las mujeres a veces creemos que es ideal juntarse con hombres porque conoces lo que no ves de ellos normalmente, puede que alguien sea completamente loco frente a los demás, pero cuando le conoces, conoces una gama de colores oculta en él, conoces su mundo, sus ideales y de ahí se inicia algo que probablemente no esperabas conocer y te gusta (en el buen sentido de la palabra), porque encuentras tal vez una confianza que necesitabas y una mano que te ayude. Nosotras las mujeres (y debo reconocer) a veces somos demasiado latosas, exageradas o tenemos amigas que son así y es por eso que a veces decidimos conversar con un amigo (y que claramente tampoco sea exagerado o latoso) para que nos entienda o nos aconseje ante un problema y eso mismo pasa con los hombres, cuando tienen algún problema o quieren conversar tu los puedes escuchar y entenderlos. 
A veces creo que por películas de amor sobre amistad entre un hombre y una mujer que al final termina siendo noviazgo hace que confundamos más el mundo, un hombre y una mujer pueden ser amigos y depende del tiempo lo que pase, si, pueden terminar siendo novios o bien pueden seguir siendo amigos para toda la vida.
Haciendo un ejemplo con las películas, Harry Potter y Hermione Granger, todos probablemente creímos que de esa amistad iba a surgir algo más que eso, pero al final de toda la saga descubrimos que nuestra bruja favorita se quedó con el pelirrojo que la trataba como lo peor al inicio de toda la historia. Lo pongo como ejemplo porque es evidente que una amistad entre un hombre y una mujer puede perdurar y además es una de las moralejas que nos dejó esta gran saga.


lunes, 23 de mayo de 2016

Ch...Ch...Changes



Tal como dice la canción del gran David Bowie ''Cambios'' y sobre todo destacar una parte de la misma canción ''El tiempo me puede venir a cambiar pero no puedo encontrar al tiempo''.
Nadie escoge en qué momento cambiar y a veces ni siquiera cómo cambiar y qué cambiar, a veces pasa porque lo necesitamos o simplemente pasa.
En muchas historias me he dado cuenta que uno de los cambios que más ocurren es cuando se termina una relación o hay una decepción amorosa, un ejemplo de ello es en la primera película de ''Sex and the city'', el personaje Carrie lleva a cabo un cambio tanto físico como psicológico, todos estamos acostumbrados a ver a Carrie ir de un lado a otro con sus amigas alegremente, escribiendo artículos que hacen a las mujeres creer en sí mismas o mostrar la realidad de ellas, pero en ese momento en que por fin va a ocurrir un acontecimiento importante en su vida el destino cambia de dirección, adiós por un largo tiempo a la Carrie alegre, hola a la Carrie que solo quiere un poco más de ''nada''. Luego de ese momento ocurren cambios, probablemente ella quiere superar a su amorío tratando de olvidarlo, pero creo que uno de los cambios notables del personaje en la película viene siendo el cambio del color de cabello, al menos para mi define un gran cambio, es como si estuvieses diciendo ''Ya no más, las cosas de ahora en adelante SI van a cambiar''.
Los cambios muchas veces sirven, al menos he escuchado y puedo decir hasta de mi propia experiencia que han servido enormemente. Sirve que de un momento a otro hayas decidido saber defenderte si es necesario a golpes y palabrotas todo para que te dejen tranquilo/a de una vez por todas luego de haber aguantado tanto. Sirve que cambies de actitud, de una completamente insoportable a una donde las aguas están más calmadas. Cuando yo decidí cambiar fue algo que realmente me sirvió hasta hoy en día, aún hay cosas por cambiar, pero de a poco se va mejorando...bueno,casi.
No solo hay cambios que son para bien, sino para mal, como por ejemplo puede que una persona sea veneno para ti pero ni siquiera lo notes, los demás si, pero tu solo te enfocas en cualquier cosa menos en las advertencias y mucho menos en las consecuencias, pero como siempre tiene que pasar algo que nos haga abrir por fin los ojos.
En nuestra vida siempre van a haber cambios, para bien o para mal, pero de todas formas nos sirven para darnos una lección, son para mejor e incluso nos pueden llevar a lo que realmente queremos y no necesariamente sabemos.



Carrie Bradshaw interpretada por Sarah Jessica Parker en las películas y serie ''Sex and the city''.

sábado, 21 de mayo de 2016

La insoportable complejidad de empezar a escribir.

Y entre las complejidades más complejas del ser humano y también empezando en este mundo peculiar del blog, con dislexia y un té verde al lado hago la primera entrada de este blog.
Es raro cuando eres pequeño, te acompleja empezar a agarrar una bici y subirte y lanzarte a la vida, todo bien hasta que besas el suelo y las lágrimas no cesan, como tu prima cuando ve la escena icónica del titanic.
Cuando digo que es raro, es porque a estas alturas, cuando eres joven o adulto te empiezas a cuestionar ''¿Cómo algo tan fácil pudo haberme costado tanto?'', si y te haces miles de preguntas filosóficas, consultando desde Sócrates a Sigmund Freud, desde tu mamá hasta tu abuelo.
Aunque no lo crean, los literatos también tienen ese problema, creo que cualquier gran escritor de hoy en día tuvo sus complicaciones para empezar a escribir, ya sea su sociedad o su misma cabeza que le aprisionaba con la gran preguntita ''¿Y si no me sale? ¿Y si a nadie le gusta?''.
Cuántas veces no me dijeron ''Tu dale'' en cada cosa que tenía que ver con la escritura y hoy en día la cosa sigue así y como soy bien cabeza dura me costó instalarme con mi Macbook (ahh...la vieron) y empezar esto.
Al fin y al cabo cuesta sentarte en una silla, agarrar el pc, celular, maquina de escribir, lo que sea para publicar lo que quieres porque te entra el miedo, el prejuicio de que la gente va a creer que no vale la pena leer los escritos, los pensamientos de una joven (o un joven, aunque no lo crean los hombres también escriben y no por eso van a dejar de ser hombres) que simplemente está pasando por una etapa y quiere compartir lo que vive y darte un buen consejo en una de esas y dependiendo del problema.
La cosa es, pierde el miedo, sácate el prejuicio y lánzate a la vida, escribe, crea, haz lo que se te ocurra, porque después uno se anda lamentando que no lo hizo y se anda preguntando cómo pudo haber sido si hubiese escrito.
Y no solo va para el literato principiante, sino también para cualquiera que quiera empezar a hacer lo que realmente quiere. Puede que hasta en una de esas conquistes al mundo.