lunes, 6 de junio de 2016

Amada música.

Seamos honestos, todos tenemos el monstruo de la música en el interior y que sale a flote en cada canción que disfrutamos, gritamos cada coro, nos sentimos como en un vídeo musical, una Marilyn Monroe en ''Diamonds are a girl's best friends'' o un Michael Jackson en ''Billie Jean'' o ''Thriller''.
Lo mismo pasa cuando tocas o ves a una persona tocar un instrumento, la vez loca, eufórica, disfrutando y amando lo que hace, te da la impresión que jamás va a soltar esa cuerda que lo lleva a la obsesión por la música, por lo que hace y que ni siquiera cortando esa cuerda la vas a poder separar de eso.
En el caso de películas como ''Whiplash'' demuestra un caso de obsesión por este maravilloso arte, la vida de un chico dedicado completamente a lo que lo apasiona y un director de orquesta con un carácter de los mil demonios, obviamente interpretado por un grande como J.K. Simmons. En sí la película te muestra dos lados, primero lo sacrificado que ha de ser dedicarte completamente a la música y sus consecuencias y por el otro la capacidad que tienes para conseguir lo que quieres, porque cómo vas a desperdiciar una presentación después de haber tenido un accidente automovilístico?


Todos tenemos en cuenta que hasta nacemos con música, incluso nos desarrollamos con ella, a qué madre no le colocaron un parlante o un audífono en el vientre para que uno se moviera como si fuese un demonio atrapado en el vientre de una persona inocente y que viene a conquistar el mundo...en pocas palabras das patadas de felicidad.

Nada se compara eso si cuando escuchas por primera vez una banda, con solo escuchar una canción quieres de inmediato escuchar las demás, toda la discografía, se anuncia una gira mundial y justo viene a tu país y no tienes dinero ni siquiera para comprar el chicle que venden afuera del recinto en donde será el concierto. La verdad hasta eso duele porque el chicle que venden a $50 en el negocio cerca de tu casa no se compara a la masa de oro que te venden en el recinto, por eso mismo si te vas a ahogar en un concierto ahógate de una manera más barata y compra el de tu casa.

Lo genial también de la música es cuando se hacen lazos gracias a ella con una persona, para explicarme bien, no por nada tienes cierto grupo de amigos que tienen los mismos gustos que los tuyos, entre ellos la música y los artistas más reconocidos y las canciones que gritan como si fuese himno nacional en un partido.
Otra cosa muy curiosa y genial que pasa también es cuando la influencia viene de personas como tus padres, es como uno de los más grandes regalos que te pueden dar.

domingo, 5 de junio de 2016

Cuando una mujer toma la iniciativa.


Atrás quedaron los tiempos en el que el hombre era el que debía invitarte a salir, en que debía pedir permiso hasta a la autoridad máxima por pedir tu mano y que en la convivencia de a dos él pusiera la mayor parte y tu como una cenicienta limpiando como buena dueña de casa. Atrás quedó todo eso.
Hoy en día la mujer es muy diferente a lo que era hace aaaaaños atrás, se refleja hasta en lo mínimo, cuando abre la puerta para que entre una persona (ya sea hombre o mujer) antes que ella, tiene que ver con una cuestión de moral, pero antes podías tocar la puerta y el hombre te las apartaba para dejarte entrar a ti primero.
Llevando las iniciativas de la mujer al plano amoroso, cada vez hay más mujeres que se atreven a declararse, a dar el primer beso, a incluso pedir pololeo o matrimonio. Claro es el caso en la película ''La propuesta'' en donde vemos una Sandra Bullock desesperada por casarse y si no lo hace chao del país en donde reside, al final todos sabemos el desenlace de esta historia, es cosa obvia del destino de las películas románticas.
Hoy en día ya es algo común que nos manifestemos ante la persona que nos gusta como si fuese el fin del mundo, también que demostremos en lo que sea, no se trata que si vas a abrir la puerta y dejar que pase primero significa que te vas a ver débil, que lo eres, que eres hombre, no, es cosa de moral. También está el tema cuando salen, quieres invitarlo pero siempre te va a estar diciendo ''no, yo pago'', si no lo haces tu quedas con la mente invadida de pensamientos ''pero si yo quería pagar'', ''una vez que me toque'', ''me carga parecer mantenida'', en sí no se trata de parecer una mantenida, si te invita es porque quiere hacerlo y qué se puede hacer con eso? tampoco es la idea dejarle ahí, negando su invitación.
No solo en el ámbito amoroso hemos decidido tomar la iniciativa, también en lo profesional y sea cual sea la situación en la vida cotidiana. No se trata de quedar como la flamante feminista anti-gillette o cera para depilar, sino porque de una manera u otra hay que defenderse, no vas a quedarte como si nada mientras te están tapando la cara o mandando el charchazo.
A veces es momento de que nos dejen empezar a escribir lo que sigue en la historia, si una mujer te saca a bailar tu anda, no la detengas con un ''no quiero'' y al rato después seas tú el que la saque a bailar, déjala que opine y en el caso de que sea la única mujer en tu trabajo o en tu equipo, toma en cuenta su idea, en una de esas es mejor que la tuya.